miércoles, 26 de agosto de 2015


SPORTING 0 REAL MADRID 0 (jornada 1 temporada 2015/2016)
  Vibrante partido inicial en el Molinón en el que el Madrid no consiguió inaugurar el casillero de las victorias, el empate a cero que figuraba en el marcador al final del encuentro, no fue ni mucho menos un empate a nada, pues el partido fue vibrante con un encuentro de ida y vuelta sobre todo en el primer tiempo y emocionante en la continuación con un Real Madrid volcado sobre el área rojiblanca donde el equipo de Benítez nunca termino de encontrar el gol. Si la primera parte siguió un guion de ida y vuelta, tras el tiempo de asueto, el equipo blanco tomó definitivamente el control del juego. El Sporting, voluntaria o forzadamente, dio un paso atrás, y conforme pasaban los minutos, le iba gustando cada vez más el punto del empate a cero en su regreso a Primera. Al contrario, el Real Madrid lo puso todo en marcar gol. Volcado en campo contrario y con las salidas de Kovacic y James mediada la segunda parte, el Real ametralló a discreción la portería rojiblanca. Isco, Bale de cabeza y de falta directa, y sobre todo, Ronaldo en múltiples ocasiones probaron a Cuéllar sin éxito. Una pena para los intereses madridistas tras cuajar un aceptable partido, pero ni con todo su caudal atacante fue capaz de superar al portero gijonés Cuellar que costo el castigo de estar ya a dos puntos por debajo del Barcelona y el Atlético.
Un gol fantasma y un posible penalti como pábulo para la polémica que también la hubo y en menos de un minuto, con una jugada que fue de una portería a otra sin entretenerse por el camino. Primero llegó un soberbio cabezazo de Sanabria aprovechando los múltiples despistes  de Marcelo, el balón se estrelló en el larguero y boto en la línea de gol que no valido el colegiado, como tampoco concedió un posible penalti en la otra área unos segundos después. Sergio Álvarez a Cristiano Ronaldo impidiéndole rematar un centro desde el lateral.

     Cuéllar, el héroe en el regreso rojiblanco. Los últimos minutos del partido sirvieron para terminar de coronar al guardameta local en medio de un Molinón a punto de estallar. Benítez dio entrada incluso a Carvajal para tener más aporte en ataque, y lo cierto es que Ronaldo tuvo dos últimas ocasiones pintiparadas para hacerse con los tres puntos al final. Dos disparos cruzados que se fabricó él mismo, pero que se encontraron una vez más con Cuéllar. Un auténtico muro, capaz de frenar a un Madrid muy completo que dejó esta vez sí detalles de un equipo reconocible en su presión y sus paredes en ataque, pero al que un día más volvió a faltarle lo más importante de este deporte: el gol.